En reuniones entre algunos empresarios chihuahuenses no se deja de hablar de la ruptura que hay entre el alcalde Marco Bonilla y el ex alcalde Eugenio Baeza, esto derivado por el asunto del relleno sanitario de Mápula.

Esto ha despertado cierta preocupación, tanto en el gremio empresarial como dentro de Acción Nacional, y es que, como una inteligente jugada, la gobernadora María Eugenia Campos se quitó del camino y evito tomar partido en el conflicto.

Aunque en las últimas declaraciones públicas entre Marco y Eugenio, se ha tratado de enfriar el problema, la realidad es que el disgusto entre ambos persiste.

La preocupación viene por dos lados, el primero es que quienes quieren apoyar a Bonilla en su reelección, no quieren tener broncas futuras con Eugenio Baeza por apoyar al alcalde, pues no se puede olvidar que Baeza Fares tiene negocios con casi toda la clase empresarial de Chihuahua.

El otro frente es por lo electoral, pues al ser un candidato que la tiene casi ganada, el escenario podría cambiar al estar en conflicto con uno de los caciques más poderosos de la entidad por no decir del país.

El periodo de precampañas terminó y a decir verdades quienes pintaron y permearon más en los diferentes sectores sociales fue la fórmula encabezada por Mario Vázquez complementada por Daniela Álvarez.

Si nos ponemos fríos en el análisis a Mario Vázquez le arrastra un colmillo de grandes dimensiones y eso lo hizo notar yendo de aquí para allá, de reunión en reunión y gastando suela, al viejo estilo de la polaca, pero también dándole tiempo a compartir por redes para su público de chavos y no tan chavos.

Morena quedó muy raspado en esta primera probada de lo que será, ahora sí, lo bueno de la campaña, con unos actuales senadores de Chihuahua invisibles y unos aspirantes que no sueltan el discurso del oriundo de Macuspana para ver si con eso les alcanza para dar pelea.

La problemática de Yox Holding se pone peor, pues no sólo van casi 40 querellas y Carlos Lazo, dueño de la empresa, ha ido tramitando amparos para evitar su detención, justo como lo hizo Armando Gutiérrez Rosas cuando estalló el fraude de Aras.

Aquí la bronca es que quienes invirtieron en Yox firmaron contratos en donde aceptaban que su dinero iba a ser destinado para apuestas, y es que, sin importar los porcentajes, los afectados dieron bandera verde para que un tercero apostara su dinero.

Los expertos dicen que será ese camino por el que Carlos Lazo buscará ampararse y deslindarse del mega fraude, pues apostó la lana de sus inversores, y simple y llanamente, perdió.